Durante el diagnóstico se tiene en cuenta la historia clínica del paciente, la evaluación postural, la palpación y los test de movilidad.
El tratamiento se realiza mediante suaves manipulaciones orientadas a aliviar el dolor, restaurar la funcionalidad y así promover la salud y el bienestar. Se utilizan diversas técnicas no dolorosas (estructurales, funcionales y fasciales ) con el objetivo de devolver el equilibrio al cuerpo.
Se trata de un complemento ideal no únicamente para lesiones sino también para aquellos que tengan una vida sana. Gracias a las manipulaciones, estiramientos, liberación miofascial y otras técnicas, se previenen futuras lesiones y se proporciona un óptimo estado físico.
Esta web utiliza cookies para obtener datos estadísticos de la navegación de sus usuarios. Si continúas navegando consideramos que aceptas su uso. Acepto cookies Más información